No creas que porque ya hayas cogido algo de color y estés broncead@ debes bajar la guardia ante el sol. Estés en la playa o paseando por el campo, la piel –¡sobretodo la del rostro!– necesita protegerse de los efectos dañinos de la radiación solar. En verano la radiación es muy intensa por lo que debes multiplicar las precauciones. Por eso conviene no olvidarse de la protección solar facial. Si quieres pillar bronce, recuerda que es más sano un auto-bronceador o un maquillaje… que coger color a base de horas al sol. Y no debes olvidar que no se trata de una cuestión meramente estética: con la protección adecuada evitarás los melanomas.
El 70 % del envejecimiento prematuro del rostro se debe a una exposición solar excesiva. Y es que los rayos UV actúan sobre las fibras de elastina provocando que la piel se vuelva frágil y flácida. El cutis está expuesto a diario al sol. Si a ello le sumamos que el grosor de la piel de esta zona es más fina, entenderemos porque es tan vulnerable. Podemos solucionarlo con un extra de protección: añadiendo un paso a nuestra rutina de belleza diaria. Para ello te proponemos el 10 de The Essentials: DNA Sun Defense (19,90 €). Se trata de una fotoprotección ligera facial potenciada por tres tipos de filtros solares: biológicos, físicos y químicos. Su activo más eficaz es la Preventhelia al 1 %. Por último. al tener un índice de protección 50+ previene del envejecimiento de la piel… ¡y de las manchas!
Además de las ayudas cosméticas, conviene recordar los mejores consejos que te ayudarán a mantener una protección solar facial adecuada:
Y no olvides que conviene proteger el cutis durante todos los días del año… ¡no sólo en los meses de verano!